No estuvo en toda su dimensión en la primera ronda porque estaba destinada a ser heroína en su casa.
Linda Caicedo se erigió como gran figura en la victoria de la Selección Colombia por 1-0 contra Corea del Sur, duro oponente que le da un sabor distinto a la clasificación a los cuartos de final del Mundial Femenino Sub-20.
Tenía la pelota y la obligación el local en un inicio a pedir de boca por un Pascual Guerrero lleno hasta las banderas, por el gran ambiente, por la felicidad de las jugadoras vallecaucanas que jugaban para los suyos nada menos que una Copa Mundo.
Por elaboración era impecable el inicio pero faltó siempre una pizca de certeza en la puntada final: a los 15 minutos se juntaban Linda, Gabriela y Natalia Hernández pero el remate final iba abierto; a los 22 la mejor ocasión de Linda llegaba tras quitarse la marca de encima y meter un derechazo que rebeldemente se negó a meter la curva; de nuevo la mejor de Colombia se animaba pero ahora le faltaban socias.
Y entonces, a los 39, vino la mejor ocasión del visitante, un remate frontal que puñeteó Luisa Agudelo, confirmando su gran momento en el Mundial y extendiendo otro tiempo más su arco en ceros.
Se salvó Corea en un gran propuesta de Osorio, que le quedó a Gaby y en una sucesión de rebotes por centímetros le queda a Linda para el remate. Pero Corea respondió de inmediato con el remate cruzado de Bae que, para nuestra fortuna, se fue por fuera.
Y entonces, ese preciso instante en la vida de Linda que se llama felicidad: a los 64 minutos vino una sutileza en la asistencia de Cabezas para su capitana, quien enfiló a la puerta y metió la pelota por el palo de la arquera, una de esas jugadas que la convierten en una de las mejores del mundo. Pero ojo que un condimento hizo este gol más especial que todos los demás: en la tribuna estaba toda su familia, la que acompañó cada uno de sus pasos, la que pudo gritar sus goles, pro fin, en vivo y en directo. Nada más que agregar.
Fue momento para una nueva exhibición de la arquera Luisa Agudelo, quien fue al palo cuando apareció un tiro libre más de las coreanas y volvió a asegurar su portería en otro centro que cortó a tiempo y claro, eso motivó a pleno a su equipo y así Maithe tuvo el segundo en un remate cruzado que por centímetros no entró y Karla Torres también sobre el cierre en un lindo remate que pasó besando el travesaño.
Igual un gol da tres puntos y así lo entendió y lo defendió la selección nacional, que ante un público leal y eufórico, celebró la clasificación a los cuartos de final. Un partido menos en el camino a la final del Mundial Sub-20. ¡Se vale soñar!